El parque automovilístico español sigue envejeciendo

El mercado automovilístico en España vive inmerso en una importante crisis desde 2020 en cuanto a producción, ventas y matriculaciones de vehículos nuevos. Según datos de Anfac, en 2022 las entregas continúan un 4,4% por debajo del año precedente, con apenas 739.469 coches vendidos. Si la comparación se hace con 2019, el mercado está un 36% por debajo de la pre pandemia.

Y algo parecido ocurre a nivel de fabricación de vehículos en España, donde , a pesar del incremento de producción en 2022, todavía estamos un 23% por debajo del ritmo de producción previo a la pandemia, con cerca de 600.000 unidades menos fabricadas”, ha explicado la patronal de los coches, Anfac.

Una crisis de ventas y fabricación iniciada a causa de la crisis económica, generada por la pandemia del coronavirus,  a la que se suma la falta de microchips a nivel global, el encarecimiento de los combustibles, el aumento de la inflación y un cambio en el modelo de movilidad.

El parque automovilístico español sigue envejeciendo

Los hábitos de consumo han cambiado, y cada vez más españoles no quieren realizar el desembolso de dinero que supone adquirir un vehículo nuevo (algo cada vez más costoso debido al aumento de los impuestos) Además, entre los jóvenes urbanos el coche ya no se percibe como algo imprescindible y apuestan por otros vehículos más prácticos para las grandes ciudades ( motos, patinetes, ebikes…) y las caravanas, que han vuelto a ponerse de moda como un medio de transporte ideal para realizar viajes sin tener que gastar en alojamiento.

En España se venden un 40% más de coches de más de diez años que nuevos

Comprarse un vehículo nuevo ya no es una prioridad para muchos españoles y las matriculaciones bajan año tras año. Cada vez más usuarios confían en las redes sociales, las plataformas de intercambio y las páginas web dedicadas a la venta de  segunda mano o las webs de compraventa de coches de ocasión para adquirir coches, motocicletas y caravanas baratas.

Los datos señalan que en España, por cada coche nuevo que se vende, se venden 2,3 automóviles de segunda mano. Desde 2019 la venta de vehículos de segunda mano y de ocasión ha aumentado casi un 25%.

Y todo apunta a que durante 2022 y 2023, este mercado va a mantener su crecimiento.  Según datos de GANVAM (Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios) el mercado español tiene capacidad para vender más de dos millones de coches usados al año.

Aunque el mercado de ocasión en su conjunto también ha caído un 5,2% a lo largo de 2022,  las ventas de los coches más antiguos han aumentado en términos absolutos.

El parque automovilístico español tiene una media de 13,5 años

El dato más preocupante de este creciente mercado de coches de segunda manos es que el parque automovilístico español no deja de envejecer y en 2021, según datos de Anfac,  la edad media de nuestro parque de automóviles era era 13,5 años, una cifra que no ha parado de aumentar desde 2007 y que es dos años superior al de la media europea.

Y la tendencia no es muy positiva: en 2022, se vendieron 652.280 vehículos con más de 15 años de antigüedad.

El resultado es un mercado de ocasión cada vez menos saneado y que dificulta la tan necesaria renovación del parque automovilístico

Esta diferencia en favor de los vehículos más viejos no existía antes de la pandemia. En 2019, las matriculaciones superaron por poco a las ventas de automóviles de más de 10 años (apenas por un 1,8%). Sin embargo, un año más tarde, las transacciones de los vehículos más antiguos superaron en un 27% a las ventas de nuevos, un porcentaje que se ha ido ampliando hasta el 39,5% actual.

Los automóviles de más de diez años suponen el 60,9% de las ventas de vehículos de ocasión en España.

Algunas de las causas de este auge del coche antiguo

La menor oferta de coches de alquiladores

Desde el comienzo de la escasez de semiconductores, los fabricantes optaron por centrar sus ventas en los dos canales que más beneficios le reporta, el canal de empresas y el de particulares, en detrimento del sector rent a car o alquiladores que es tradicionalmente el que ofrece vehículos más nuevos al mercado de ocasión, por lo que estas empresas tienen que mantener durante más tiempo los vehículos que ya tenían.

El canal de alquiler de coches o rent a car cerró el año 2022 con solo 114.481 unidades matriculadas entre turismos y vehículos industriales, lo que supone una importante caída del 35,58% respecto al ejercicio anterior, según los datos de la consultora MSI para Feneval, la Federación Nacional Empresarial de Alquiler de Vehículos.

Según ha declarado el presidente de Feneval, Juan Luis Barahona, no esperan que la situación mejore mucho este año y ha vuelto a solicitar a las marcas de automóviles que, “ante la previsión de cifras récord de turistas para este 2023 del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, mantengan el 20% del total de las ventas de Vehículos Nuevos a los rent a car para poder seguir atendiendo la demanda”.

La inflación creciente y la inestabilidad económica

A esto se le suma el contexto macroeconómico actual, con una alta inflación que se ha trasladado a los precios de los coches. Esto último es especialmente evidente entre los coches de ocasión, que hasta septiembre (último dato disponible) han incrementado su precio un 19%, hasta los 17.950 euros de media, según datos de Ganvam

“La incertidumbre económica está haciendo que el mercado español apueste por el vehículo de ocasión, que sube precios por la mayor demanda”, afirma Gerardo Cabañas, director general de Coches.com.

Datos para el optimismo

A pesar de esta problemática la producción de coches en España continúa aumentando a ritmo de dos dígitos gracias a la mejora en el suministro de chips y de componentes. En noviembre de 2022, las fábricas nacionales ensamblaron más de 226.000 vehículos, lo que supone un incremento del 16,9% en comparación con el mismo mes del año pasado, según los datos facilitados por Anfac,

Hasta noviembre de 2022 en España se habían fabricado un 4,2% más de coches que en el mismo periodo de 2021, con un total de 2,03 millones de vehículos, lo permitiría cerrar el año con unos 2,2 millones de vehículos fabricados.

Aun así,  la fabricación nacional se sigue situando un 23% por debajo del ritmo de producción previo a la pandemia, y con cerca de 600.00 unidades menos fabricadas.

Por tipo de vehículo, los turismos son los que más crecen en noviembre, con un 18,4% más (184.306 unidades), mientras que los vehículos industriales y comerciales aumentaron un 11%, hasta los 41.858 coches. Sin embargo, en lo que va de año estos últimos continúan en números negativos, con una bajada del 2,8% respecto a los primeros once meses de 2021.

Mejora la rentabilidad en la industria

Aunque las ventas bajen, los beneficios de algunos fabricantes, que se están adaptando a un entorno de menores ventas, crecen. Por ejemplo, en grupo Volkswagen en los nueve primeros meses del año vendió en todo el mundo un 3,4% menos de unidades (6.243.000 vehículos) en comparación con el mismo periodo de 2021, aumentó sus ingresos un 8,8% (203.000 millones de euros) y sus beneficios después de impuestos escalaron un 12,4%, hasta 12.771 millones.

Las marcas priorizan las ventas de modelos que más márgenes reportan, es decir, los premium.

Los actores piden soluciones para fortalecer la industria automovilística

Para paliar este envejecimiento del parque, el sector pide medidas que incentiven la compra de un coche nuevo y que este no sea necesariamente eléctrico, ya que es un tipo de vehículo que no está aún al alcance de toda la población y todavía genera incertidumbre en los conductores respecto a la autonomía y la disponibilidad de puntos de recarga.“

El último plan Renove duró hasta el 2020 y no se prorrogó. Hoy hay planes Renove en determinadas autonomías, como en Galicia. El Plan Moves 3 está muy orientado a la eficiencia energética y prima a los vehículos eléctricos, lo cual es positivo para zonas urbanas, pero no tanto para zonas rurales donde la infraestructura de carga es deficiente.

Desde Anfac, la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones, advierten de las graves consecuencias de esta situación. El aumento del impuesto de matriculación que ha entrado en vigor en enero de este año tampoco beneficia al sector. La directora de Comunicación de Anfac, Noemi Navas, ha hecho notar que la industria del automóvil se está debilitando y corre el riesgo de perder la relevante posición que ostenta en términos de PIB y empleo de calidad en nuestro país.

Por su parte, desde la Asociación Nacional de Comerciantes de Vehículos se defiende la puesta en marcha de un plan específico de recuperación para el sector automovilístico. Se están estudiando las medidas oportunas para reactivar e impulsar el sector del automóvil.

Una de las principales medidas que incluiría este plan es la congelación del impuesto de matriculación, con el fin de motivar a los compradores y que la venta de vehículos suba. Por otro lado, también se estudia una rebaja del impuesto de hidrocarburos o una reducción del IVA al 10% para los coches eléctricos.

El oasis de los coches eléctricos.

Podría decirse que los únicos que no se han visto tan duramente perjudicados por toda esta situación son los vehículos eléctricos. Los compradores se sienten cada vez más atraídos por esta opción y su venta se mantiene al alza a pesar de la situación de crisis, los elevados precios y la falta de estructura de carga.

Los coches eléctricos siguen ganando fuerza en nuestro país desde 2020, a pesar de la caída de ventas del resto de vehículos. Actualmente tiene una cuota de mercado del 3%, lo cual comparado con las cifras de venta de vehículos térmicos no es mucho, sobre todo si lo comparamos con otros países europeos.

El parque automovilístico español sigue envejeciendo

Según datos de la consultora Jato, el coche eléctrico acaparó un 15% de la cuota de mercado en el norte europeo en el tercer trimestre de este año, frente al 3,8% del sur, es decir casi cuatro veces más.

El país que lidera de largo y hace ya varios años la venta de vehículos eléctricos es Noruega, donde casi tres de cada cuatro matriculaciones son eléctricos.

Uno de los principales problemas para explicar las bajas ventas de coches eléctricos en España es la escasa infraestructura de recarga pública con la que cuenta el país. No solo en cantidad, sino también en calidad. A lo que se une la baja cantidad de ayudas fiscales y nuestro menor poder adquisitivo.

En España solo el 2,48% de los 16.565 puntos de carga públicos que tiene España permiten cargar el vehículo en menos de media hora, un 81,4%, son puntos con una potencia de como mucho 22 kW, que tienen un tiempo de carga de un mínimo de tres horas.

En Portugal, la cuota de mercado de eléctricos e híbridos ronda el 20%. ¿Por qué? Porque una de las medidas que tienen ellos es que si se compra uno de estos vehículos se deduce el 21% de IVA. Portugal tiene peor renta per cápita que España. En un país con más renta per cápita como es el caso de Alemania, la ayuda directa a la compra asciende a 10.000 euros. El coche cuesta 45.000 euros en el concesionario, tú pagas 35.000 euros y te olvidas. Aquí en España no”, comenta Félix García, director de comunicación de Anfac.

Por fuentes de energía, los coches eléctricos puros supusieron en noviembre el 5,9% de la cuota de producción, mientras que los híbridos enchufables representaron el 7,4%. Ambos tipos de vehículos han aumentado su producción un 66,9% y un 64,7%, respectivamente.

En 2022, los eléctricos puros tuvieron el 5,4% de cuota de fabricación, con 110.680 coches ensamblados en España, y los híbridos enchufables un 6,4%, con 130.780 unidades. Entre ambos, acumulan un volumen de producción de más de 241.000 vehículos, un 11,9% de todos los automóviles que se fabrican en nuestro país.

La electrificación debe acompañarse de la renovación del parque. Nuestras estimaciones son que para cumplir los objetivos de descarbonización en 2030 tendríamos que reducir las emisiones un 3,6% cada año. Ahora estamos en un 1%. Estamos reduciendo las emisiones de los coches nuevos matriculados, pero como el parque está envejeciendo, nos produce un efecto negativo. La renovación puede darse con un plan Renove, pero también con un cambio fiscal”, propuso en una entrevista con CincoDías José López-Tafall, director general de Anfac,

2035 puede ser el año decisivo para la industria automotriz europea

Entre toda la incertidumbre que rodea al futuro del automóvil en Europa, en Noviembre de 2022 La Unión Europea, en el marco de su lucha por llegar a la neutralidad climática en 2050, confirmó un preacuerdo que deja los días contados la posibilidad de comprar en el mercado de primera mano un turismo o furgoneta diésel, gasolina o híbrido dentro de las fronteras de las naciones que la componen.

A partir de 2035, solo estará permitida la venta de turismos y furgonetas 100% eléctricos. Ni siquiera los vehículos híbridos se librarán del veto.

En el supuesto hipotético de que la prohibición entrara en vigor en esa fecha, la industria automovilística española perdería más del 96% de sus ventas, y todo ello a pesar del alza que han registrado y de los esfuerzos e inversiones de los fabricantes para ofrecer alternativas menos contaminantes a los consumidores.

El panorama no es muy diferente en el resto del CEE, según los últimos datos disponibles de la European Automobile Manufacturers’ Association (ACEA), correspondientes a finales de 2020, los coches de tipo turismo impulsados de forma exclusiva por batería eléctrica, los únicos que será legal vender nuevos llegado el momento, representaban de media en la UE un 0,5% del total de turismos en circulación, sin que en ningún país del club el porcentaje fuera más allá de un 2%.

La industria del automóvil en España

España es el 2º fabricante de vehículos europeo y 9º del mundo. En España hay establecidas 9 marcas multinacionales con 17 plantas, que en 2021 ensamblaron 2.1 millones de vehículos, incluyendo 16 versiones electrificadas.

1.000 proveedoras de automoción pertenecientes a 720 grupos empresariales están instaladas en el país, garantizando el servicio y suministro de las Plantas de Fabricación

La facturación de la industria de automoción en su conjunto (fabricantes y componentes) representa el 10% del PIB español y es responsable del 18% del total de las exportaciones españolas. El superávit comercial del sector fabricante de vehículos alcanzó los 18,900 millones de euros en 2021.

Las plantas de producción españolas se encuentran entre las más eficientes y automatizadas de Europa con 1.000 robots industriales por cada 10.000 empleados. Este sector presenta uno de los mayores índices de inversión en modernización, automatización e I+D+i entre los sectores industriales.

A pesar de todo este potencial, la industria automotriz española vive momentos de incertidumbre en el mercado interno con un descenso continuado de ventas, a pesar del buen comportamiento de los vehículos electrificados, por la situación económica, la falta de subvenciones y un cambio de percepción del coche como símbolo de estatus.

Mientras tanto, el mercado de ocasión sigue creciendo a nivel de empresas y particulares, lo que está provocando un preocupante envejecimiento del parque automovilístico.

Y todo ello, con la amenaza europea de la prohibición total de vender cualquier vehículo nuevo que no sea totalmente eléctrico en 2035, lo que podría suponer perder un 96% de las ventas de vehículos.